La construcción de pistas para deporte, y en concreto sus pavimentos, tiene algunos problemas en lo que a su ejecución y conservación se refiere. Para realizarlas de manera óptima es imprescindible usar una técnica concreta en cada caso. Es necesario establecer unos criterios de calidad en lo relativo al material y a los productos empleados. Además la puesta en obra es crucial.
Qué tener en cuenta al construir una pista deportiva
La calidad de los suelos en la construcción pistas deportivas está en función a su flexibilidad. Se usa el caucho y capas de resinas que son acrílicas y elásticas.
Otra clase de pavimento, diferente al de resina sintética, es el llamado en ”quick”. Se trata de un suelo muy permeable, pero a la vez rígido y que está hecho de hormigón poroso, lo que permite un buen drenaje.
Una cuestión bastante importante está en el estudio de cómo rebotan las pelotas y los balones, debido a que el pavimento debe ayudar a que el rebote no sea falso, para que el control de la jugada sea el máximo posible. Ésta es una muestra más de la importancia que tiene la instalación de un pavimento de calidad, llevado a cabo por una empresa contrastada y capaz de realizar trabajos al máximo nivel de profesionalidad.
El suelo base de una pista deportiva
La base de una pista deportiva puede ser el hormigón, el césped artificial, la tierra batida o el asfalto. Dependiendo de cuál sea, así será su flexibilidad, la duración o el coeficiente de deslizamiento. Por ejemplo, para la Federación Internacional de Tenis, una pista de nivel 3 significa que no es ni muy rápida ni muy lenta. Es el caso de las pistas de tenis de tierra batida o las de césped artificial.
Las pistas de hormigón o de asfalto son muy rígidas y necesitan juntas de dilatación. Por ejemplo el pavimento dry-quick se construye con juntas de dilatación de neopreno.
La evacuación del agua en un pavimento deportivo
El drenaje del agua en una pista deportiva es fundamental, pues da buena cuenta de la calidad llevada a cabo en su construcción. En el caso del hormigón poroso, el drenaje se realiza a través de la porosidad del mismo. Para el caso del hormigón pulido o del suelo asfáltico, el agua se evacúa mediante la escorrentía, es decir, el agua se desplaza a través de una pequeña pendiente que existe en la superficie de la pista.
El mantenimiento de las pistas deportivas
Los pavimentos de césped artificial, como la construccion de pistas de padel y también los de tierra batida necesitan un mantenimiento periódico para no perjudicar la calidad del juego. Por otro lado existen pistas muy duraderas en torno a 30 años que son del tipo tennisquick, es decir, las de hormigón poroso, que requieren un mantenimiento mínimo.
Si necesites construir una pista deportiva para un club, una asociación, una vivienda particular, etc te recomiendo que te pongas en manos de profesionales contrastados, como por ejemplo, el grupo Pineda, porque una pista deportiva puede durar muchos años, si está bien realizada, con los materiales adecuados y si la construcción es de calidad.